Para Herbart, la pedagogía depende de la Ética y la
Psicología. La ética como medio para alcanzar la educación moral, y la
psicología como método de acción, de este modo, el educador conoce el camino,
los medios y los obstáculos para la adquisición de la finalidad educativa.
Según esta explicación, la pedagogía no se podría definir como ciencia al
depender de otras ciencias: Ética y psicología. No obstante, Herbart
proporciona un campo propio de estudio y de acción a la pedagogía: La
educación.
La Escuela Nueva, es una escuela que se renueva, cambia y se
adapta a los nuevos tiempos y, en esa medida, se distingue de la escuela
tradicional. Enmarcada entre 1889 hasta 1939, es un movimiento que influye en
muchas iniciativas educativas como por ejemplo: La Institución Libre de
Enseñanza (ILE), Los Centros de Interés de Decroly, el Plan Dalton, el Método
de Proyectos de Killpatrick, las escuelas de Winnetka en Chicago, el Plan Jena
de Petersen, el Método Freinet o el Método Montessori, son claros ejemplos de
esta Escuela Nueva. A nivel Internacional, también destaca la Pedagogía de
Lorenzo Milani, el método de alfabetización de P.Freire,
En resumen, la Pedagogía forma parte de las ciencias
sociales cuyo objeto de estudio es la educación. Herbat fue quien definió un
campo propio de estudio y de acción a la pedagogía, la educación y,
recientemente, (Hace poco más de un siglo) se inició un movimiento llamado
Escuela Nueva donde el aprendizaje proviene de la experiencia, convirtiendo al
niño en el protagonista de la educación.
Ahora bien, ¿por qué no hacemos lo mismo con el fútbol? ¿Por
qué seguimos pensando y trabajando tal como nuestros entrenadores hicieron con
nosotros? Acaso es…. ¿Por falta de recursos?, ¿Por ignorancia? o ¿Por
comodidad?.
En mi opinión, Herbart le da a la pedagogía un campo propio
de estudio y de acción, la educación, pero esta se puede dar en cualquier
ámbito de la vida y, por tanto, esta debiera ser atendida desde todos los
ámbitos (Formales o no) donde el niño/a se desarrolle: En casa, en el colegio
y, porque no, en el club de fútbol.
Seguro que cuando hablamos de educación, todos pensamos en
el colegio o el instituto pero ¿Qué es la educación? ¿A caso la educación no es
más que el proceso de transmisión de unos valores, unos ideales y una manera de
hacer las cosas “correctamente”? Educamos a un niño/a cuando le enseñamos a
hablar para que se comunique con su entorno, a leer para poder manejarse en el
medio donde vive y a pensar para tomar las mejores decisiones que le convengan
en cada momento. Entonces… ¿Por qué no enseñamos a los niños a “leer”, a
“hablar” y a “pensar” en el terreno de juego? Y, sobre todo, ¿Por qué no
educamos a los niños mientras aprenden a leer, hablar y a pensar en el terreno
de juego?
Para alcanzar todas estas metas, necesitamos de un modelo
pedagógico coherente, secuenciado y adaptado a las características propias de
la edad de los niños de nuestros equipos de fútbol, pero sobre todo, para
alcanzar estas metas necesitamos personas formadas y capacitadas para atender a
estas necesidades y características individuales y evitar caer en el error de
pensar en que por tener un título de Entrenador de Nivel 1, 2 o 3 se está
capacitado para trabajar con niños en la etapa de formación porque, una vez
más, hay que tener en cuenta que el fútbol con 6 años no es lo mismo que el
fútbol con 12 años, ni el futbol con 16
años.
Antonio Egea Bernat
Licenciado en Pedagogía por la UIB
Director-Gerente en Pedagosport y Entrenador de fútbol base